¿Combate o complicidad?
“Narcotráfico en Venezuela 2024: Un negocio que lucra al poder y se expande” actualiza la información sobre los actores en este negocio ilícito, entre los que se cuentan los carteles criminales, como el Cartel de Los Soles, Cartel de Sinaloa (México), Cartel del Golfo (Colombia); también los grupos guerrilleros (disidencias de las FARC y el ELN) y las megabandas criminales, como el Tren de Aragua.
Son grupos que debido a los altos niveles de corrupción han sabido burlar muchos de los controles oficiales durante años y “han ganado aliados dentro de instituciones formales para mantener el negocio en pie y repartir las ganancias”, señala el informe.
Se destaca que uno de los principales cambios relacionados con el narcotráfico en Venezuela es la designación de nuevas autoridades encargadas de combatir este negocio ilícito, especialmente el nombramiento, en agosto de 2024, de Diosdado cabello Rondón como ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, además de vicepresidente sectorial para la Seguridad Ciudadana y Paz. Bajo su mando queda la seguridad ciudadana, la coordinación y supervisión de la actuación de los cuerpos policiales, así como las políticas públicas sobre el tráfico, consumo ilícito de drogas y legitimación de capitales. También desde la vicepresidencia regula cualquier actividad coordinada entre ministerios para de garantizar el control del narcotráfico.
Cabello Rondón es señalado en la Corte del Distrito Sur de Nueva York, Estados Unidos, de ser presuntamente miembro del Cartel de Los Soles, “integrado por militares de alto rango en Venezuela que pasaron de ser actores pasivos que permitían la movilización de mercancía, hasta convertirse en operadores activos del narcotráfico encargados de crear las rutas, gestionar los envíos y cobrar las ganancias”, se lee en el reporte. Se trata del mismo expediente judicial en el que fue condenado, en abril de 2024, el general Clíver Alcalá Cordones a 22 años de prisión y por el cual aún espera juicio el también general Hugo Carvajal Barrios, exjefe de inteligencia de Hugo Chávez.
En el texto se señala que son diez organismos los encargados de la lucha antinarcóticos en Venezuela. Además del Ministerio de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, están otros órganos que dependen de las instrucciones de Cabello Rondón: la Superintendencia Nacional Antidrogas (Sunad), la Oficina Nacional Contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo (Oncdoft); el Cuerpo de Policía Nacional Bolivariana (CPNB) y el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc).
Se destaca también que, en noviembre de 2024, Cabello Rondón designó como nuevo jefe de la Superintendencia Nacional Antidrogas (Sunad) al mayor general Danny Ramón Ferrer Sandrea, quien en febrero de 2025 aseguró que se decomisaron 40 toneladas de drogas en todo 2024, “una cifra 23% más baja que la reportada el año previo cuando se decomisaron más de 52 toneladas de drogas, en su mayoría cocaína y marihuana”.
La disminución de las incautaciones en Venezuela se da en momentos en que los reportes de organismos internacionales advierten sobre el incremento “pronunciado y prolongado tanto de la oferta como de la demanda de cocaína” desde el año 2022. A esto se agrega que, en 2024 las autoridades colombianas incautaron más de 848 toneladas de cocaína (14% más que en 2023), y 452 toneladas de marihuana, (8% más que el año anterior).
Otros organismos con competencia en drogas en Venezuela son el Ministerio Público y los tribunales; el Ministerio de Defensa, que incluye a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y el Comité Antidrogas. En este punto el informe señala que “las máximas autoridades de los entes encargados de luchar contra el narcotráfico en Venezuela han sido además sancionadas por varios países de América y Europa, por socavamiento de la democracia y el Estado de derecho, corrupción y violación a los derechos humanos”.
¿Quiénes facilitan el negocio de la droga en Venezuela?
Transparencia Venezuela en el exilio revela una lista de actores que participan en la cadena del tráfico ilícito de drogas, desde la producción hasta el lavado de las ganancias, muchas de las cuales actúan desde dentro de instituciones formales, que mantienen el negocio de las drogas en pie. Van desde organizaciones de variada procedencia y tamaño, algunas no interesadas en la violencia, hasta quienes están en los sembradíos.
Entre los facilitadores de las drogas en Venezuela identificados están los proveedores de insumos químicos para procesar y filtrar la droga; de armas de fuego; de transporte marítimo y personas a cargo de embarcaciones; de transporte aéreo y pilotos; y de transporte terrestre y conductores.
También empresarios que usan compañías para exportar e importar la droga, así como para lavar dinero; negociadores y encargados de la logística para la exportación; asesores en tecnología; agentes financieros que admiten el ingreso del dinero ilícito en el sistema bancario y bursátil y agentes no financieros para lavar dinero.
En el ámbito institucional hay registro de casos de funcionarios que facilitan el negocio de las drogas, como militares y policías encargados de los controles en territorios y puntos de control, que protegen los cargamentos; jueces, fiscales, funcionarios de aduanas, de registros públicos, instituciones de la banca pública; y de órganos de control del sistema financiero.
“Esta identificación se logró luego de la revisión de instrumentos jurídicos como la Ley Orgánica de Drogas y la Ley Orgánica contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo, sentencias publicadas por el Tribunal Supremo de Justicia, notas de prensa de entes públicos con competencia en seguridad y justicia y trabajos de investigación publicados por medios de comunicación independientes”, señala el reporte, con ejemplos específicos en cada caso.
¿Qué hay que saber sobre las rutas de las drogas en territorio venezolano?
De acuerdo con el informe, las rutas de ingreso de la droga en Venezuela se mantienen y están principalmente en los estados Zulia, Táchira y Apure que limitan con la región del Catatumbo en Colombia, considerada el principal enclave de cultivos de coca de ese país. Desde estos estados salen los narcóticos rumbo a las islas del Caribe, Centroamérica y Europa.
Zulia sigue destacando como el principal puente de la droga, con rutas plenamente identificadas. “Usualmente emplean los ríos Catatumbo y Tarra para transportar los envíos, así como pistas clandestinas en ambos lados de la frontera”, se lee en el informe. En este estado hay reportes sobre las actividades con drogas de la banda criminal Tren de Aragua, designado en 2025 como grupo terrorista internacional por el gobierno de Estados Unidos, y la presencia de ELN, que también extiende sus actividades a otras zonas del país, especialmente Táchira y Apure.
En el occidente juega un papel importante en el tránsito de la droga por el estado Falcón, cuya cercanía con otros países del Caribe es aprovechada por las organizaciones criminales para sacar su mercancía hacia Aruba y Curazao. En el centro del país transita la droga por los estados La Guaira (anteriormente Vargas) y Carabobo, donde están los principales puertos y aeropuertos venezolanos. Al oeste hay rutas del narcotráfico en Nueva Esparta, Sucre, Monagas y Delta Amacuro, a pocos kilómetros de Trinidad y Tobago.
Puedes leer el informe completo aquí