Los diputados de la Asamblea Nacional, en el ejercicio del rol constitucional del Poder Legislativo como contralor de la gestión pública, han sido constantes en la denuncia de cómo la corrupción en Venezuela sigue aumentando y profundizando sus efectos dañinos sobre la calidad de vida del venezolano que durante dos décadas ha sido sometido a carencias de todo tipo, hasta llevarlos a sufrir los embates de una emergencia humanitaria compleja.

Share This