La fracción opositora dentro de la Asamblea Nacional ha salvado su voto en la aprobación de créditos adicionales en las sesiones del parlamento durante el mes de agosto, por considerar que no hay información clara y detallada del uso que le da el ejecutivo a los recursos.

La falta de información es, a juicio de los diputados de la bancada opositora, una forma de obstaculizar las labores de contraloría que deben ejercerse desde el parlamento nacional. Hasta agosto de 2011, los diputados del sector oficialista, alzaron su mano para aprobar un total de 124 créditos.

Sumado a la carencia de información, los voceros de los partidos opositores también  argumentaron, para salvar su voto, el rechazo a la tipificación de extraordinarios dado a los recursos provenientes de la devaluación para el financiamiento de determinados créditos, además catalogaron los créditos como superfluos y aseguraron que estos son utilizados por el Gobierno nacional para acciones de proselitismo político y para financiar alianzas de carácter político con otros países.

Asimismo, a juicio de los diputados de la oposición los créditos adicionales aprobados por sus homólogos del oficialismo afectan la descentralización, ingresos y  competencias de las gobernaciones y alcaldías.