Activa Dilo Aquí contra la corrupción en ayuda humanitaria
Se ha diseñado una sección para recibir datos e informaciones sobre acciones cometidas por cualquier persona que, en beneficio propio, viole los principios humanitarios, establecidos en la resolución 46/182 de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Transparencia Venezuela, 10 de noviembre de 2020. La corrupción es un delito generalizado que afecta a todos los países y economías del mundo. Además de dificultar el crecimiento económico, socava la confianza en los gobiernos y sus instituciones, desvía los recursos en detrimento de iniciativas y políticas públicas, impacta negativamente en la prestación de servicios esenciales, como salud, infraestructura y educación. La corrupción, como muchos otros delitos, encuentra su origen en la codicia y el desmedido afán de lucro. Pero, nada es más perverso que hablar de corrupción en la respuesta humanitaria.
De acuerdo con Susana Raffalli, en entrevista concedida a Crónica Uno, la corrupción en el proceso humanitario puede ser definida como “los procesos en los que el poder se usa de forma irresponsable para un beneficio diferente al imperativo humanitario, es decir, manejar los recursos que se nos asignan y a los que podemos tener acceso para salvar vidas y aliviar el sufrimiento, con otro fin”. La corrupción en este sector puede manifestarse como malversación, enriquecimiento ilícito, si la respuesta es de tipo financiera y puede ser objeto de concusión y manipulación política, cuando es no financiera, apunta Raffalli.
La situación del país ha generado el inicio o intensificación de las actividades de variedad de actores humanitarios, con una consecuente mayor respuesta humanitaria a la crisis. De acuerdo con la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), La respuesta humanitaria se rige por principios de humanidad, el sufrimiento humano debe ser atendido donde quiera que se encuentre, y su objetivo es proteger la vida y la salud y garantizar el respeto a los seres humanos, caracterizándose por su neutralidad, imparcialidad, e independencia operativa.
En las últimas semanas, actores políticos han utilizado la respuesta humanitaria de UNICEF, dirigida a aliviar el sufrimiento de niños y niñas venezolanas como propaganda. Ante esta situación, diputados de la Asamblea Nacional y miembros de la sociedad civil alzaron su voz señalando la violación de los principios humanitarios por parte de los miembros de la cuestionada Constituyente pertenecientes al partido oficialista. La oficina de la UNICEF en Venezuela, por su parte, también hizo un llamado a todos los actores políticos a no utilizar la respuesta humanitaria con fines políticos y electorales.
Transparencia Venezuela se une al llamado a los actores políticos a abstenerse de utilizar la ayuda humanitaria como un instrumento de manipulación política, tal como se ha hecho con la ayuda social brindada con los CLAP. Manipular a través de la necesidad, el hambre y el sufrimiento de una población envilece al ser humano.
Como respuesta a esta irregularidad, Transparencia Venezuela ha puesto a disposición la aplicación móvil Dilo Aquí, que tendrá un área específica para denunciar la “corrupción en ayuda humanitaria”. En esta sección se recibirán datos e informaciones sobre corrupción en el sector humanitario, por parte de cualquier persona que, en beneficio propio, viole los principios humanitarios establecidos en la resolución 46/182 de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
El llamado es también a la ciudadanía, a la sociedad civil, junto a la Asamblea Nacional, para velar por el cumplimiento de estos principios en la respuesta humanitaria, y a denunciar cualquier irregularidad de la que puedan ser víctimas o testigos.