Como el ganado al matadero se trasladan carabobeños por falta de transporte público
Desde las cuatro de la mañana se visualizan largas colas en las congestionadas y muy estrechas paradas de los diferentes puntos ubicados en toda la Gran Valencia para trasladar a su destino a cerca de un millón de pasajeros que esperan impacientes la llegada del transporte público para poder conseguir un asiento cómodo dentro de la unidad. Quienes no se encuentren entre los primeros afortunados, deben decidir ente arriesgar su vida y sostenerse como puedan de las puertas o ventanas de las unidades, al más puro estilo de los países subdesarrollados del África y Asia, o tomar un camión de carga con cuerdas y barandas para movilizarse cual ganado al matadero.
Esta carencia casi absoluta del sector transporte en la capital carabobeña se debe a una paralización del 90% de dicha flota ocasionada por diversos factores, entre ellos, la disparada inflación nacional que impide a los prestadores del servicio urbano dotar a las unidades de los insumos necesarios, así como de reponer las piezas dañadas y conseguir repuestos como cauchos y baterías a causa de la escasez y de los elevados costos que se incrementan prácticamente a diario.
La Gran Valencia, donde por lo menos un millón de ciudadanos depende directamente del transporte público para trasladarse a su destino, hace dos años contaba con 8 mil unidades laborando, en contraste con la actualidad, que según datos ofrecidos por Adolfo Alfonzo, presidente del Sindicato Único de Transporte de Carabobo, solo 800 se encuentran en funcionamiento, solo el 10% de la capacidad, por lo que se avizoradora una catástrofe inminente con respecto a la demanda pública del trasporte.
El coste del servicio brindado por las unidades también resulta un problema. El último aumento publicado en gaceta oficial, a principios de septiembre, por el gobierno nacional dirigido al sector transporte tasó el precio en 280 bolívares. Sin embargo, esa cantidad es irrisoria en comparación con el valor de los productos y servicios básicos. El sindicato de transportistas de la entidad costera ha decidido incrementar la tarifa a 500 bolívares, estableciéndose de igual manera este coste a estudiantes y personas de tercera edad, antiguamente exonerados del pago como subsidio del estado que, según afirma Alfonzo, son tres meses sin pagar por parte del gobierno.
Testimonios ofrecidos por una empleada de servicio doméstico, quien prefirió mantener su nombre en el anonimato y que reside en el populoso sector de Bella Vista, al sur de Valencia, narró su día a día para subirse a una unidad. “Normalmente me levanto a las 5:00 a.m. y debo caminar hasta la estación de bus más cercana que es Plaza de Toros. Ahí espero aproximadamente una hora a que llegue el bus, que por lo general está repleta. Como puedo me monto”.
De la misma forma, aseguró que, en ocasiones, para no llegar tarde a su trabajo, se ve obligada a usar unos transportes improvisados que pueden ser camionetas pick up, camiones cava, o de estaca con barandas y mecates colocados para intentar dar seguridad a los usuarios, que le cobran más del triple, es decir, mil bolívares para dejarla unas pocas cuadras más adelante.
Una persona, como la mencionada en el párrafo anterior, que gana entre ocho mil y diez mil bolívares diarios, se ve obligada a usar entre tres y cuatro colectivos al día, lo que suma un total de dos mil bolívares en gastos de transporte, lo que expone un desasosiego compartido que pesa tanto para la sociedad como para los choferes.
Lacava y los TransCarabobo
El gobernador de Carabobo, Rafael Lacava, informó en un acto público el 16 de noviembre que 81 unidades Yutong están prestando el servicio a la comunidad, de las cuales, aseguró que 57 fueron repotenciadas y 15 son nuevas.
”Estamos muy contentos por la reactivación de todo lo que es el tema de TransCarabobo, conseguimos 22 autobuses en la calle cuando llegamos y hoy tenemos 81… estamos intentando acabar con ese transporte de estaca, que parece que estuvieran trasladando ganado”, reconoció el gobernador.
Sin embargo, esa cantidad resulta ínfima para la demanda del sector. Sin contar que aún no se sabe por qué la Gobernación de Carabobo no pudo dar celeridad a las reparaciones de los 57 autobuses mencionados por Lacava.
Rafael Rodríguez Olmos, articulista del portal web Aporrea, en una nota de prensa publicada el pasado 2 de octubre afirmó que existen tres “cementerios” con cientos de autobuses chinos Yutong establecidos en Puerto Cabello, Los Guayos y Guacara, detenidos por trámites burocráticos y guisos rojos multimillonarios. Además, por lo menos la mitad de estos autobuses se encuentran inutilizados por las mismas carencias ya mencionadas.
Metro de Valencia
Por otra parte, ya serán cumplidos cuatro años y cinco meses desde que el presidente de la República, Nicolás Maduro anunciara con bombos y platillos la inauguración, a medias, de las estaciones Rafael Urdaneta y Francisco de Miranda de la línea 2 del metro de Valencia. Para su momento, el primer mandatario precisaba que la inversión rondaba los 1.600 millones de dólares y beneficiaría a 30.000 personas.
En la actualidad, el Metro de Valencia transporta unas 50.000 personas diariamente, lo que significa una sobresaturación de su capacidad en cuanto a usuarios, mencionando su falta de mantenimiento y el colapso de sus estaciones. Con el agravante que solo dos trenes se encuentran en funcionamiento y tardan aproximadamente media hora en cumplir el recorrido agregando a su vez la falta de vigilancia, permitiendo la impunidad delincuencial.
El sindicato de Transportistas del Estado Carabobo ha asegurado que se planea un nuevo aumento en la tarifa del transporte público que será tasado en mil bolívares, sin la aprobación de los Ejecutivos Municipal ni Nacional. Esto con el fin de mantener al menos el 10% de las unidades en funcionamiento, ya que de no hacerlo, un paro absoluto del transporte público sería lo que le espera a la ciudadanía.