Barrio Adentro IV de fiesta mientras los hospitales agonizan
El Hospital Cardiológico Infantil “Gilberto Rodríguez Ochoa” (HCIL) enmarcado en la IV fase de la Misión Barrio Adentro creada por el fallecido presidente Hugo Chávez en 2006, cumplió 9 años de inaugurado. El Gobierno lo celebra, pues se trata del primer centro asistencial especializado cirugía cardiovascular infantil, sin embargo, creemos que la grave situación que afrontan el resto de los hospitales del país por escasez de insumos y medicinas, falta de dotación de equipos y poca asignación y distribución de recursos presupuestarios, no es motivo de festejo.
En lo concerniente a salubridad e instalaciones, tienen espacios adecuados. Cuentan con un estricto orden de ingreso, horario de visitas y más aún, un escrupuloso control de los infantes intervenidos que se hace extensivo a la alimentación de la progenitora. A diferencia del Cardiológico Infantil, el J.M. de los Ríos resultó menos favorecido. Los insumos para infantes con cáncer se encuentran escasos desde los últimos meses, esto sin contar la falta de equipos y fallas en la infraestructura. El viceministro de Hospitales del Ministerio del Poder Popular para la Salud, Francisco Hernández, señaló que “a partir del primero de agosto el Ministerio del Poder Popular para la Salud inició un plan de recuperación y humanización de los espacios en los diferentes centros de atención de salud del país, es plan abarca algunos centros hospitalarios, sobre todo hospitales tipo IV”.
Entrevistamos al doctor José Félix Oletta, quien fue ministro de Salud entre los años 1997 y 1999, a fin de conocer su opinión sobre la Misión Barrio Adentro debido a su amplio conocimiento y experiencia en salud pública. Para este reconocido médico uno de las grandes debilidades que ha tenido el gobierno nacional con la MBA es que al ser creado como un sistema paralelo de salud independiente, aumentó los gastos pero no los resultados.
Considera que la misión ha sido el ensayo de un programa enfocado en la atención primaria de la salud, que aumentó los gastos de la nación y que hasta ahora no ha dado mayores resultados. “Así lo evidencian indicadores como el de mortalidad materna que en 2012 se ubicó en 70 muertes por cada 100 mil niños registrados y para 2014, aumentó a 76 muertes maternas”.