Transparencia Venezuela, 25 de julio de 2024.- Evidencias de personas que reciben bolsas de alimentos con una planilla de 1 x 10; prohibición del paso de María Corina Machado, líder de Vente Venezuela que apoya al candidato Edmundo González Urrutia; en alcabalas o carreteras cerradas por reparaciones viales a menos de una semana del cierre de campaña; ministros y cuentas oficiales de RRSS haciendo propaganda por el presidente y candidato Nicolás Maduro; vehículos del Estado rotulados con propaganda electoral de Maduro; suspensión de servicio de transporte público para trasladar a militantes del PSUV y empleados públicos a actos de campaña de Maduro, y cierre de locales que prestan servicio a María Corina Machado, Edmundo Gonzáles y sus colaboradores, caracterizan la campaña electoral en Venezuela, entre otras irregularidades.
Esto ocurre en un contexto en el que Nicolás Maduro amenaza con “un baño de sangre” y el presidente de Brasil Lula Da Silva, por primera vez, enfrenta a Maduro; y treinta exmandatarios y presidentes de Iberoamérica responden con un comunicado exigiendo respeto a los compromisos adquiridos por el gobierno en Barbados.
Autoridades migratorias niegan el ingreso de periodistas extranjeros a Venezuela, Lula recibe críticas de Maduro al sistema electoral brasileño y retira la observación de elecciones de su país en Venezuela, que está cada vez más restringida a los países democráticos.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresa preocupación por cierre masivo de medios y la Corte Penal Internacional (CPI), entretanto, advierte que la oficina dirigida por el fiscal Karim Khan se enfocará solo en aquellos funcionarios o exfuncionarios que “tengan el mayor grado de responsabilidad” en los hechos que investiga.