Este informe se ofrece al ciudadano para conocer y debatir el proyecto de Ley de presupuesto 2013, tiene como fin mostrar de forma sencilla y resumida cuánto dinero tiene previsto el Ejecutivo recibir y gastar durante el 2013 al igual que la distribución de esos recursos. El presupuesto de la Nación es un documento difícil de comprender. Se necesita una versión resumida, simplificada y escrita en lenguaje sencillo, que permita estar informado del destino de los recursos públicos y el correcto uso de los mismos. El gobierno nacional tiene el compromiso de asignar y distribuir el dinero proveniente del petróleo, los impuestos y la deuda contraída en nombre de los ciudadanos, por tanto monitorear que el presupuesto sea elaborado y ejecutado según a los establecido en las leyes.

Los supuestos económicos establecidos por el gobierno nacional respecto al comportamiento de las principales variables macroeconómicas para el 2013, se espera obtener un crecimiento económico de 6% del PIB con un nivel de inflación entre el 14% y 16%, teniendo como variables claves a considerar un precio de petróleo y un tipo de cambio estimado en $55 y 4,30 Bs./$ respectivamente.

La inflación es fundamental en orden de comprender la disponibilidad financiera real del Estado, tal como se comprueba por los resultados obtenidos en presupuestos anteriores, la disparidad entre la inflación estimada y la inflación obtenida a final de año, es una de las principales amenazas que atentan contra la efectividad del presupuesto de la Nación, el cual al ser planificado con base en premisas que se alejan del comportamiento real de la economía limitan la eficiencia y operatividad del Estado para asumir sus responsabilidades.

Los fondos extrapresupuestario son un tema de gran importancia, desde 2005 han ingresado alrededor de USD 143.581, principalmente distribuidos entre el Fondo Chino con USD 99.584 millones, Fondo Gran Volumen USD 20.000 millones y Fondo Chino USD 23.997 millones, representando una cantidad importante de recursos de los cuales no se dispone las herramientas para monitorear la correcta ejecución presupuestaria y el cumplimiento de las metas y objetivos de los proyectos  programas impulsados.

Mucha de estas decisiones recaen sobre el ejecutivo, contrayendo el espíritu de descentralización de la Constitución de la República, esto se ve reflejado en la concentración del 75% de los recursos del presupuesto en el Poder Ejecutivo, dejando sólo el 25% de los recursos para el funcionamiento de gobernaciones, alcaldías y el resto de los poderes públicos.