En el censo de la Gran Misión Vivienda Venezuela del año 2014 se registraron 3.711.265 personas, el gobierno Nacional prometió la construcción de viviendas para esas familias registradas entre 2011 y 2017. Para abril de 2015 sólo el 19% había sido entregado.

De cada 100 Bs. asignado a las misiones, 65 son aportados por PDVSA y 54 van directo a la GMVV. Cabe la interrogante, ¿si el petróleo ha venido en descenso, de dónde saldrá el dinero para la construcción de viviendas?

Es importante mencionar que la construcción de algunas obras ha generado contaminación ambiental, bloqueo en las vías de acceso, afectando al bienestar de la ciudadanía en general.

Existen casos de falla en las viviendas construidas, la familia González fue adjudicada con una vivienda y al habitarla se dieron cuenta que no contaban con la conexión al agua.

En términos de planificación urbana, la construcción de viviendas en el marco de la GMVV ha cambiado el paisaje del país, llenándolo de edificios, beneficiando a muchas familias, sin embargo, hay viviendas que no cuentan con los servicios básicos necesarios: agua, electricidad, aseo, entre otros. Una vivienda de calidad requiere atención al hábitat que garantice una vida digna. Las misiones deben garantizar el derecho de las personas en situación de vulnerabilidad.