Organismos internacionales han advertido que persisten las desigualdades por razones de género en el ámbito social, en los estudios, la política y el mercado laboral, lo que incide en el aumento de la pobreza y afecta las condiciones de vida de la población, especialmente en un contexto de Emergencia Humanitaria Compleja como el que enfrenta Venezuela
Transparencia Venezuela, 8 de marzo de 2024. Además de los desafíos que conllevan la brecha de género, la desigualdad, la falta de oportunidades, la protección al trabajo y de la remuneración, así como el acceso al cuidado parental, las mujeres también enfrentan grandes obstáculos en otras importantes áreas. Según un reciente informe del Banco Mundial, las deficiencias son mayores en el área de la seguridad. Esto significa que las mujeres están amparadas por apenas un tercio de las protecciones legales que necesitan frente a la violencia doméstica, el acoso sexual, el matrimonio infantil y los femicidios.
De igual modo, están expuestas a delitos graves como la sextorsión, la trata de personas, trabajos forzados y otras formas de esclavitud moderna. Según el Índice Global de Esclavitud, en Venezuela habría actualmente 270.000 personas en esta situación, lo que lo ubica como el país de las Américas la mayor cantidad de víctimas de esclavitud moderna.
Resultados del monitoreo realizado por la organización Mulier revelan que, entre 2018 y 2022, la cantidad de mujeres rescatadas de redes de tratas de personas creció de 372 a 1.390. No obstante, se trata de un subregistro que no muestra la magnitud real del problema.
Por otra parte, Organismos internacionales como la Oficina contra la Droga y el Delito de la ONU han señalado que las mujeres son afectadas de forma diferenciada por la corrupción y han insistido en la importancia de contar con datos con perspectiva de género que permitan comprender mejor el fenómeno. Se asume que las mujeres en situación de vulnerabilidad suelen ser víctimas de hechos de corrupción como tener que pagar a un funcionario público por recibir algún servicio o tener acceso a la salud, la educación, a la alimentación o al trabajo.
Algunos de estos ilícitos pueden ser reportados a través de la plataforma Dilo Aquí, de Transparencia Venezuela. En 2023, la App recibió 16 denuncias de casos de violencia de género relacionados con corrupción, y 3 en lo que va de 2024.
Otras instancias internacionales han advertido que persisten las desigualdades por razones de género en el ámbito social, en los estudios, la política y el mercado laboral, lo que incide en el aumento de la pobreza y afecta las condiciones de vida de la población. Esta situación es especialmente alarmante en un país como Venezuela, que desde 2015 enfrenta una Emergencia Humanitaria Compleja derivada de la corrupción.
Esta realidad generó el mayor desplazamiento humano forzado de América Latina y el segundo del mundo, con poco más de 7,7 millones de personas que abandonaron el territorio nacional, tal como indica la reciente actualización de la Plataforma de Coordinación Intergerencial para Refugiados y Migrantes de Venezuela (R4V). Según estimaciones de la Organización Internacional para los inmigrantes (OIM), cerca de 49% son mujeres.
Mujeres productivas
El informe del Banco Mundial reveló que, lejos de acortarse, la brecha de género es mucho más amplia de lo que se pensaba y que las mujeres de distintos países tienen solo dos tercios de los derechos legales de los que gozan los hombres. Esta realidad tiene gran impacto en los índices de pobreza y constituye un freno para el desarrollo, lo que pone de relieve el importante rol de la población femenina en distintos ámbitos de la sociedad.
De acuerdo con el estudio, que abarcó 190 economías del mundo, las desigualdades y la falta de equidad configuran un panorama de obstáculos para que la población femenina ingrese al mercado laboral y contribuir así con el progreso de ellas mismas, de sus familias, sus comunidades y su país.
En este contexto y como parte de las actividades para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, la Organización de las Naciones Unidas, a través de ONU Mujeres, promueve la campaña “Invertir en las mujeres, acelerar el progreso”, que resalta la necesidad de destinar recursos a los esfuerzos para estrechar la brecha de género, y que ampliar los servicios con empleos decentes podría generar casi 300 millones de puestos de trabajo de aquí a 2035.
ONU Mujeres sostiene que para garantizar que se tengan en cuenta las necesidades y prioridades de las féminas, los gobiernos deben priorizar la financiación con perspectiva de género y aumentar el gasto público en servicios esenciales y protección social. De igual modo, destacó que los responsables de la formulación de políticas deben valorar, reconocer y tener en cuenta que la contribución de las mujeres es clave para las economías de todo el mundo a través del trabajo. “Las mujeres dedican aproximadamente tres veces más tiempo al trabajo de cuidados no remunerado que los hombres, y si a estas actividades se les asignara un valor monetario representarían más de 40% del PIB”, agrega el informe.
En tanto que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en su índice de brechas de género en el mercado laboral venezolano, que estudia diferentes aristas de este fenómeno -como la participación laboral, diferencias en el ingreso y feminización de la pobreza, las cuales permiten tener una visión general al respecto-, evidenció que la participación femenina ha disminuido más que la masculina y que existe una diferencia en los ingresos laborales por género que se ha ido incrementando con el tiempo.
Además, señala que la feminización de la pobreza ha aumentado y la mayoría de las mujeres que trabajan lo hacen en el sector informal. Según el reporte, se necesitan medidas para promover la igualdad de oportunidades y reducir la brecha de género en el mercado laboral venezolano.
Lisette González, coordinadora de difusión de la ONG Provea, declaró recientemente que, si bien las mujeres han tenido logros importantes en los últimos 20 años, respecto de sus derechos, también es cierto que estos logros se han detenido. “Las tasas de trabajo de las mujeres han comenzado a estancarse. Eso las pone en desventaja porque muchos jefes de hogar son mujeres pobres y enfrentan retos mayores”.
No obstante, considera que la mujer venezolana ejerce un papel destacado en la resolución de los problemas del país y que su presencia es fundamental en las luchas de la sociedad civil, por lo que se requieren de políticas efectivas para proteger su participación en todos los ámbitos de la vida nacional.
En el marco del Día Internacional de la Mujer, Transparencia Venezuela se une a las voces que claman por un mundo más transparente, más seguro e igualitario para las mujeres y niñas, especialmente las que se encuentran en situación de pobreza, las indígenas y migrantes, que, por tanto, son las más vulnerables a ser víctimas de la corrupción.