Misión Barrio Adentro: ¿Fraude sanitario?
Sin embargo en el siguiente informe de Transparencia Venezuela se explica cómo a pesar de haber recibido una cantidad de recursos que superan lo invertido entre el lapso de 1985-2002, los indicadores básicos como la Mortalidad Materno Infantil, el acceso a los servicios médicos y la aparición de enfermedades endémicas erradicadas en el país, reflejan el fracaso de la inversión realizada.
Barrio Adentro se fundó sobre la base de llevar el acceso a la red primaria a las clases desfavorecidas, pero confrontó desde su creación fallas en la medición de indicadores objetivos para evaluar su alcance en la población, lo que a su vez conllevó a que las autoridades de Salud ocultaran cifras de boletines epidemiológicos durante la gestión del general Jesús María Mantilla, y además que se impusiera por encima de la gestión del despacho sanitario a la Misión Médica Cubana, conformada por militares y médicos, como única encargada de producir estadísticas o reportar informes pocos transparentes o en muchos casos secretos.
Aunque a partir de 2003 la inversión en salud fue superior al 2 % del Producto Interno Bruto (PIB) que era el porcentaje en el que los gobiernos anteriores al de Hugo Chávez dedicaron a la salud, las cifras oficiales hablan de que llegó a duplicarse hasta alcanzar 7,5% del PIB. Esta indicador sin embargo no se corresponde con la disminución de las fallas para las que precisamente se creó Barrio Adentro; la mortalidad infantil y la mortalidad materna se incrementaron en los últimos 12 años, incluso hasta presentar disparidad de cifras entre organismos oficiales como el propio Ministerio de Salud y el Instituto Nacional de Estadísticas.
En materia de recursos, el financiamiento a MBA si se toman en cuenta la totalidad de las misiones hasta 2014, la MBA cuenta con el 51,3 % del total de los recursos asignados a ellas; pero si se toma en cuenta al aporte al gasto social total baja hasta 17,1%.
Entre el lapso de creación de Barrio Adentro y 2015 en el país, en vez de aumentar la cobertura a servicios de salud, hubo un retroceso en diferentes niveles, se multiplicaron los casos de malaria, lo mismo que el dengue y en el caso del chikungunya, el Gobierno ocultó deliberadamente cifras de esta enfermedad que se registró en 2014.
Con la misión también se produjo el deterioro institucional, cuando el Gobierno dejó de lado las recomendaciones de la Federación Médica Venezolana y las sociedades científicas, así como al colocar a militares o funcionarios que en promedio no pasaron más de dos años en promedio al frente del Ministerio de Salud. A esto se suma la creación de la figura del Médico Integral Comunitario que provocó la crítica a estos profesionales a los que en reiteradas ocasiones se les evaluó el desempeño sin que arrojaran comentarios positivos sobre el trabajo en la red hospitalaria.
Como concluye el informe de Transparencia Venezuela, las metas de Barrio Adentro “no han sido ni siquiera medianamente alcanzadas. La cuantiosa inversión realizada ha debido tener un destino diferente para que no existiera corrupción en el programa social. No se entiende el deterioro de los diferentes establecimientos y servicios y, sobre todo, la inexistencia del SPNS (Sistema Público Nacional de Salud), habiendo existido una ley para su constitución y funcionamiento”.