El Reino Unido anuncia su primera lista de sancionados por violar Derechos Humanos y por corrupción
Transparencia Venezuela, 8 de julio de 2020.- El Reino Unido quiere dejar de ser un refugio para quienes hayan martirizado a sus pueblos y expoliado sus arcas públicas. Así este lunes 6 de julio, el Foreign Office (Ministerio británico de Asuntos Exteriores) anunció su primera lista de ciudadanos extranjeros a los que les negará el acceso a su territorio y les congelará los fondos y propiedades, por ser sospechosos de haber violado los Derechos Humanos o estar incursos en hechos de corrupción.
La decisión del Gobierno británico supone un punto de inflexión, porque hasta ahora el Reino Unido y, en particular su capital, Londres, es considerado como una de las lavadoras de dinero más grandes de Europa.
La lista de sancionados está compuesta por 47 funcionarios y exfuncionarios de Rusia, de Arabia Saudita y de Myanmar, así como por 2 organizaciones de Corea del Norte, informó el ministro británico de Exteriores, Dominic Raab, durante una comparecencia ante la Cámara de los Comunes.
“Aquellos con sangre en sus manos no quedarán impunes para venir a este país y comprar una propiedad en Kings Road, hacer sus compras de Navidad en (el exclusivo barrio) de Knightsbridge y pretender lavar su dinero sucio en alguno de nuestros bancos. No, ustedes ya no pueden poner un pie en este país y nos apoderaremos de sus ganancias mal habidas si lo intentan”, advirtió el funcionario.
Las sanciones fueron impuestas gracias a una ley que en 2018 aprobó el Parlamento británico, que crea un sistema independiente del existente en la Unión Europea (UE) y del cual el Gobierno de Londres saldrá el 31 de diciembre, cuando se ejecute el brexit.
Los castigados
Dominic Raab informó que 25 rusos involucrados en la muerte en 2009 del abogado Sergei Magnitsky están entre los sancionados. Magnitsky murió en una cárcel rusa, presuntamente víctima de los golpes que sus carceleros le propinaron el mismo día que llegó a su celda, tras develar una trama de corrupción que habría utilizado el famoso Museo del Hermitage, de San Petersburgo, para desviar unos 230 millones de dólares hacia Estados Unidos y Europa.
Por su parte, los saudíes que figuran en la lista son 20 y entre ellos está Saud al-Qahtani, a quien las autoridades de Estados Unidos señalan como el líder del equipo que asesinó en 2018 al periodista y articulista de “The Washington Post” ,Yamal Khashoggi, dentro del consulado saudí en Estambul (Turquía). Saud al-Qahtani es considerado un cercano colaborador del príncipe heredero del reino petrolero, Mohamed bin-Salám.
Dos altos jerarcas militares de Myanmar completan el grupo de las individualidades. Estos son señalados por Londres de participar en el exterminio al que ha sido sometido el pueblo Rohingyas en los últimos años.
Y por último en la lista están dos organizaciones de Corea del Norte, las cuales utilizarían disidentes del régimen comunista imperante en el país asiático como esclavos.
Cambio de rumbo
La decisión del Gobierno británico es un viraje importante para enfrentar a quienes han escogido las islas británicas para instalarse y disfrutar de sus riquezas.
Esta imagen se vio corroborada hace unos meses cuando la prensa reveló que Isabel Dos Santos, la hija del expresidente de Angola, José Eduardo Dos Santos, tenía una casa en el lujoso barrio de Kensington, cerca de donde viven los duques de Cambridge, los príncipes Guillermo y Kate, valorada en 13 millones de libras (17 millones de dólares).
Dos Santos, a quien los angoleños llaman “la princesa”, es considerada la mujer más rica de África, con una fortuna estimada en 2.000 millones de dólares. ¿Cómo logró amasar semejante cantidad de dinero? De acuerdo a una investigación realizada por el Consorcio Internacional de Periodistas, gracias a sus nexos con su progenitor, quien gobernó el rico país surafricano entre 1979 y 2017.
La mujer fue designada por su padre en 2016 como presidenta de Sonangol, la estatal petrolera; y allí habría logrado hacer mucho dinero gracias a la entrega irregular de contratos.
Hay varios ejemplos como el de “la princesa”. El exdictador chileno Augusto Pinochet acostumbraba pasar temporadas en la capital británica tras dejar el poder en 1990. Tradición que se rompió luego de que el juez español Baltazar Garzón tratara en 1998 de detenerlo para procesarlo por los crímenes cometidos bajo su régimen.
Pero no solo exgobernantes ven en Londres su refugio, sino también empresarios que se han enriquecido enormemente gracias a sus nexos con los gobernantes de turno. Uno de ellos el ruso Roman Abramovich, quien vendió su negocio petrolero al consorcio estatal ruso Gazprom y es considerado cercano al presidente de Rusia, Vladimir Putin.
Abramovich es en la actualidad propietario del célebre equipo de fútbol inglés Chelsea. Gracias a esta millonaria inversión logró tener una “visa dorada” para residir en el país, pero la misma fue revocada por el Gobierno en 2018 por sospechas de que su fortuna no fue bien habida. Esto a pesar de que el oligarca se ha esforzado por mejorar su imagen donando millones de dólares a instituciones como la Galería Tate, uno de los museos londinenses más renombrados.
Apenas el comienzo
A los 47 nombres que figuran en la lista de sancionados por el Gobierno británico podrían incorporarse otros más en el mundo. Nada más ser anunciada la medida, desde el opositor Partido Laborista, por ejemplo, reclamaron la inclusión de altos funcionarios chinos en respuesta tanto a la represión a las protestas pro democráticas, que desde el año pasado se vienen desarrollando en la región especial de Hong Kong, así como por el trato que el régimen de Pekín da a los uigures, la minoría musulmana del país.
El ministro Raab ya anunció que su despacho escuchará las sugerencias que le formulen los diputados.