Un ejercito de hierro tras el dorado venezolano
Fabiola Zerpa- El reportaje se centra en explicar los detalles –inéditos hasta el momento- de un acuerdo geológico entre los gobiernos de China y Venezuela, firmado en septiembre de 2012. Expertos consultados señalaron que la iniciativa implicó una cesión de una obligación legal del Estado –la prospección de minerales en su territorio- a un socio comercial, con preocupantes consecuencias para el país, como lo son la cesión de información vital y la soberanía sobre sus recursos. Ninguna de las partes difundió el monto del acuerdo, ni tampoco contestaron solicitudes de entrevistas para conocerlo.
En específico, el documento acordó que instituciones de China sobrevolaran y recorrieran el país para realizar estudios geofísicos y geoquímicos con el fin de identificar los minerales susceptibles de ser explotados. En particular, a los chinos se les otorgaba la exploración y cálculo de reservas de hierro, oro y bauxita (en Bolívar); fosfato (Táchira, Mérida y Falcón) y cobre (Táchira).
El proyecto implicaría la presencia de 352 expertos chinos durante cinco años desplegados en 27 campamentos en 12 estados del país para emprender expediciones, analizar hallazgos, formar personal técnico y montar laboratorios. El convenio fue firmado entre el Ministerio de Petróleo y Minería (Rafael Ramírez), en específico el Instituto de Geología y Minería (con Avilio Lavarca como presidente), y la empresa china Citic (Hong Bo, su presidenta). También figura en la dirección del plan el Buró Estatal de Prospección Geológica de China. El trabajo generó controversia en la comunidad científica del país, incluidoa la Academia Nacional de las Ciencias, y políticos. El trabajo nunca fue desmentido por el ministro Rafael Ramírez, y desde que se publicó, ni el Gobierno venezolano ni el chino han informado sobre los avances y valoración económica del acuerdo. Tampoco ha habido seguimiento sobre la implementación del plan.